Llevamos ya un tiempo de campaña electoral pese a que formalmente no ha empezado. ¿Dan respuesta los partidos a las preocupaciones ciudadanas, paro, desigualdad, empobrecimiento, exclusión?
11 octubre, 2019 munizipalistokAunque formalmente la campaña electoral va del 1 al 8 de Noviembre y las elecciones el 10 de Noviembre, a nadie se le oculta que la campaña electoral lleva ya varias semanas de hecho y que los ultimos y actuales discursos políticos deben ser interpretados desde esa clave electoral.
Esto sugiere una pregunta que nos parece interesante, dado lo que suele ocurrir en estas fases, priorización de discursos para marcar perfil propio y de diferenciación de los competidores, y por tanto, utilización de aquellas temáticas y enfoques que creen que les identifica y diferencia mejor ante sus posibles votantes, nos interrogamos ¿responden las campañas y las agendas políticas en los medios a lo que son las preocupaciones de las mayorías ciudadanas?
Otra pregunta posterior sería si mantienen tras las elecciones las promesas hechas, pero eso, ya sería otra cuestión -y le seguiremos como intentamos seguir haciendo la pista- pero ahora nos preguntamos ¿responden los discursos y tomas de posición dominantes desde los partidos a lo que los y las ciudadanas señalan como prioridades en sus preocupaciones?
Veamos cuales son estas.
Las series históricas del Euskobarómetro muestran con una diferencia notable como la preocupación por el paro ha sido dominante con mucha diferencia entre 2014-2019
Y si nos acercamos al primer euskobarómetro del 2019 de Junio, la tendencia se mantiene
Y aparece con gran fuerza transversal el malestar democrático presente en todas las preferencias políticas
Estas son las preocupaciones como primera, segunda o tercera opción
Es decir segun el último EuskoBarómetro de Junio 2019 el paro y empleo sigue siendo la principal preocupación con mucha diferencia respecto al segundo item «Desigualdades sociales y Bienestar» pero es que además este segundo item es relacionable netamente con el primero. El paro y las condiciones de empleo precario, temporal, inestable, inciden en las desigualdades sociales y el grado de mala redistibución del bienestar.
12/09/2019 EITB «Así es la brecha entre hogares ricos y pobres en las localidades de Hegoalde»
Esto que es tan evidente como lo son las cifras del empobrecimiento y las diferencias de renta. La Plataforma por los Derechos Sociales de Gasteiz en un acto de protesta y denuncia frente al Gobierno Vasco en Septiembre de este año y recogido y publicado por ejemplo en DNA en https://www.europapress.es/euskadi/noticia-plataforma-derechos-sociales-acusa-gobierno-vasco-intentar-ocultar-datos-encuesta-pobreza-20190925173952.html expresaban como en Euskadi, la pobreza relativa ha ido aumentando de 318.161 del 2016 a 382.316 en el 2018 estando en riesgo de pobreza el 17,7% de la población y en riesgo de pobreza grave 109.735 habiendo aumentado un 5,3% sobre el año 2016.
En cuanto a las diferencias de renta reflejan en parte la desigualdad social, así, una mirada por ejemplo, segun datos del INE a la situación en Vitoria-Gasteiz a la que se le suele dar una renta media de 14.226€ por persona, es solo una primera aproximación pues una mirada mas desagregada nos acerca diferencias por barrios, así…
Es decir, el riesgo de empobrecimiento en Euskadi es alto y como vemos en la denuncia de este colectivo no es consecuencia de ningún designio ni desastre natural. No es obra divina sino bien humana, son consecuencias de unas políticas económicas antisociales que significan pérdida de poder adquisitivo de los sueldos, aumento de la precariedad perdida de cobertura en prestaciones por desempleo y recortes en las prestaciones y recursos sociales. Todo lo cual se traduce en diferencias sociales que acaban acumulando las ubicaciones de los sectores mas empobrecidos en determinados barrios y ubicando otros para los mas privilegiados lo que se traduce en las enormes diferencias medias en los barrios. Es normal en consecuencia los resultados de la encuesta y la preocupación por el paro y las desigualdades.
Por otro lado revisando literatura sobre si la situación del paro o precariedad influye en el sentido del voto nos encontramos que pese a la diversidad de enfoques y relaciones las conclusiones parecen ir en la línea de la no influencia personal pero si como percepción colectiva. Así el estudio «Paro y voto: ¿Afecta al voto la experiencia de desempleo? de M. Cainzos y Carmen Voces (2015) en Revista de Estudios Políticos, 168, pg. 115-150, indica
«Dicho todo esto y en espera de mayores averiguaciones, nos inclinamos por la lectura más simple y parsimoniosa de nuestros resultados, que consiste en verlos como una rotunda refutación de la expectativa de que la experiencia personal de desempleo influye sobre el sentido del voto. Lo cual, a su vez, se puede tomar como indicativo de que la correlación agregada existente en España entre paro y voto al partido del gobierno ha de ser explicada en términos de voto sociotrópico; y, de manera más general, como respaldo a los muchos autores que sostienen que, en la medida en que se da voto económico, este es, sobre todo, sociotrópico, no egocéntrico, es decir, se basa más en el estado de la economía del país que en el de la economía personal.» consultable y descargable en https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=5683186
¿Se reflejan estas problemáticas que preocupan principalmente a la ciudadanía en la campaña electoral? ¿Las estamos viendo en sus discursos, en sus tomas de posición?
Parecería que la percepción de la importancia del paro y la desigualdad es dominante entre la ciudadanía y sería esperable que esto se reflejara en los discursos electorales. Esto parece que quiere reflejar por ejemplo el articulo de Cristina Alonso el 02 octubre 2019 en la La Información en el artículo «El mercado laboral frena en seco a un mes de las elecciones y calienta la precampaña» donde dice
«El mercado laboral ha frenado en seco y ha hecho saltar todas las alarmas a un mes de la repetición de las elecciones generales. A nadie se le escapa, ni al propio Gobierno en funciones, que el empleo empieza a dar señales preocupantes al compás de la desaceleración de la economía que ya reflejan la mayoría de los indicadores. Como tampoco se obvia que el paro sigue siendo la principal preocupación de los españoles, según el CIS. Un cóctel, en definitiva, que va a convertir el empleo en un tema clave en la carrera hacia el 10-N. De hecho, los partidos ya están armando sus estrategias en la precampaña electoral en torno a dos grandes ejes centrales –con permiso de Cataluña–: la economía y el empleo.«
Ya veremos como se da esta presencia y lo que es mas importante si en los discursos que utilicen se apuestan por medidas concretas y no por simples declaraciones genéricas que sirven para que posteriormente nada de la propia acción política consiga cambiar la lógica tendencial de la economía global/local. Esa lógica, que hemos visto de larga tendencia y acelerada por la crisis, marcada por la competencia global y que incluye desvalorización acelerada del costo de mano de obra y exigencia neoliberal de bloqueo de toda medida fiscal progresiva y exigencia de que el estado no intervenga ni presione a la acción de los agentes económicos (esto es, no intervengan -nada de proteccionismos sociales- y si interviene, que sea para apoyar la acción empresarial y/o financiera). Lo que hemos visto una y otra vez y que ha significado, mas precariado, mas paro, mas empobrecimiento, etc…
En el caso vasco, el juego de la alianza discursiva PNV/PSOE de que el apoyo al crecimiento y por tanto apoyo al mundo financiero/empresarial es necesario como estrategia de país, junto a no tocar la presión fiscal a esos agentes o incluso aliviarla, lo que permitifía a medio plazo una combinación de mejorar empleo y mantener una redistribución via políticas sociales…
Acumulación y política social como condición de eliminación de la pobreza y mejora del bienestar parece ser su discurso estable indiscutible en su simpleza discursiva pero falso en la realidad, pero con el que parecen que han conseguido apoyo electoral en todo el entramado institucional como fondo de los linces de perfil, lectura y afirmación ideológico/estratégica ante acontecimientos y broncas mediáticas. Una vez mas sin resultado reales, pero es probable que con el mismo discurso se vuelve a mantener su presentación. Estrategia, mucho ruido y confusión sobre elementos de impacto mediático secundario pero que permitan que las preocupaciones y debates sobre el fondo de las preocupaciones ciudadanas se oculten, invisibilicen y pierdan presencia.
Veremos si emerge en esas condiciones y como será percibido y valorado por el electorado. Al que se le presentará una estrategia de país idealizado y maquillado frente al pais de los y las ciudadanas real con sus problemas y preocupaciones cotidianas, con sus diferencias, angustias y penalidades, suplantados por un país de una supuesta clase media cada vez mas inexistente pero que se usa como señuelo y al parecer con cierto éxito.
En cualquier caso mas allá del espectro político que la ciudadanía reconfigure, como municipalismo seguiremos apostando por el control institucional y la exigencia de políticas acordes a la exigencia de municipios de la gente, con la gente y para la gente, donde sus derechos y su ciudad de futuro y presente de disfrute, cuidado y sostenibilidad se asegure frente a los modelos de cemento, intereses elitistas y crecimiento insostenible. Seguimos empeñados en que la marca realmente green es una marca de otra estrategia para la gasteiz de las actuales y siguientes generaciones…
Etiquetas: Elecciones, políticas sociales, Precariedad
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